Dificultad: Media/Alta (es Barranquismo, no senderismo), necesaria buena forma física.
Horario Total: de 4 a 6 h. (Según grupo).
Longitud aprox.: 6’5 Km.
Punto de partida: carretera Bierge a Yaso, Km. 6 (sierra de Guara).
Punto de llegada: presa de Bierge.
RESUMEN:
Descenso acuático y lleno de belleza. Destaca la cueva de “Los Tisidores”, donde el río Alcanadre se adentra formando un atractivo rincón. Los estrechos, y las badinas son de los más espectaculares; que junto con la fuente de la Támara, la de Puntillo, y la presa de Bierge son suficientes alicientes para hacer de lo más agradable la excursión.
ACCESO:
Desde Bierge tomaremos la carretera hacia Morrano. Dejando un vehículo de recogida en el aparcamiento de la central de Bierge, seguiremos por esta carretera hasta que aproximadamente sobre el Km. 6 una curva muy cerrada a la izquierda nos muestra a mano derecha un olivar, y junto a el una pista forestal.
Siguiendo unos 200 metros por esta pista encontraremos una explanada donde podremos dejar el segundo vehiculo.
Seguiremos ya a pie por esta pista conocida con el nombre del Pinar de Morrano; sin dejarla encontraremos una barrera que nos corta el paso, nos indica que vamos por el camino correcto, siguiendo por esta pista siempre descendente, pasaremos por indicadores verticales hacia el huevo del Morrano, por esta pista también dejaremos a un lado la ermita de San Martín que quedará a nuestra izquierda, ya no muy lejos de aquí encontraremos una señal vertical que indica el inicio del barranco de la Peonera Inferior, en el suelo podemos observar una fita de piedras indicando la senda a seguir.
Esta senda que desciende muy rápida y verticalmente nos conduce al río.
Al final de esta senda ya divisamos el río y a nuestros pies observamos una instalación para realizar un pequeño rapel de unos 10 metros.
Una vez realizado este descenso ya estamos en el interior del río alcanadre.
RECORRIDO:
Los tramos iniciales son sencillos, y el paisaje que nos rodea es de lo más salvaje. Lo primero que nos llamará la atención es la cueva de los “Tisidores”, donde el río se adentra formando un bello recodo. Río abajo, pronto llegaremos a la entrada de los “Fornazos”, donde una sucesión de estrechos, badinas y caos parecen trasladarte a un mundo de fantasía y color (recomendamos tener cuidado, en un destrepe, donde un cordino colocado al lado izquierdo puede facilitar bastante salvar este paso de unos 6 m.).
Una larga badina nos abre el paisaje y muestra la fuente de la Támara. A la derecha, junto a unos juncos encontraremos una senda y una pista de petroleros intransitable, se accede a Morrano. Dejando atrás la Támara, y tras un tramo falto de interés, toparemos a mano derecha con el final de una pista que conduce a Morrano.
Unos metros más abajo hacen su aparición unos estrechos, un caos y unas preciosas fuentes que no dejan lugar a dudas del punto en que nos encontramos: el “Puntillo”. Recreándonos en este peculiar tramo, sólo nos queda salvar una bonita badina y seguir río abajo realizando “aguatreking” durante aproximadamente 1 hora hasta la presa de Bierge y, si somos atrevidos, saltar los 10 m. del salto de agua de la central.
RECOMENDACIONES:
Saber nadar. Estudiar el descenso y elegir la posibilidad más adecuada. Tener paciencia con las aglomeraciones (en verano) y, ser cauto en el recorrido.
Mirar previsión meteorológica de la zona, con tormentas puede ser peligroso.
MATERIAL:
Es obligatorio el traje de neopreno, escarpines, buen calzado, casco, mochila y bote estanco, (cuerda de 25 m., arnés y rapelador para la entrada al barranco indicada en esta reseña).