Hola de nuevo, amigos.
Como muchos de por aquí, conoceis a Scrupy, el Siberian Husky que venia con nosotros, quisiera hacerle un pequeño homenaje.
Scrupy fué un animal maravilloso, que desprendía vitalidad a raudales, incluso con muy avanzada edad, siempre de buen humor, siempre dispuesto a comerse cuantas montañas que se le pongan por delante, sociable con personas, paciente con niños y valiente como él solo. Scrupy fué tambien un perro extremadamente tozudo e independiente, tal y como se conoce la fama de ésta raza de maravillosos animales, aún así, por el motivo que sea, decidió que yo era su líder y puedo decir que Scrupy era "mio" y "solo mío", pues él sólo me hacia caso a mí, cuando empezó a tener miedo a la tormenta, venía sólo a mi lado de la cama a pedir protección y no seguía instrucciones de nadie, sin esperar antes mi asentamiento.
Pero en ésta vida, nada es eterno y a finales de 2013, con unos 13 años de edad (o más), su estado físico empezó poco a poco a deteriorarse, empezando por una dermatitis que se hizo crónica, siguiendo por problemas en orejas, posíblemente fruto de la dermatitis, con una operación por medio por semana santa y después de eso, su vitalidad, su alegría y ganas de vivir, empezaron a disminuir, junto con los estragos que le causaba la dermatitis en todo su cuerpo. Desde hace mes y medio, su estado general de salud, empezó a empeorar bastante más y tras hacer su último viaje (a Cabo Norte), decidimos que lo mejor que podíamos hacer por nuestro amigo que tantos buenos momentos nos ha dado, llegados al punto de no retorno, era aceptar que ésto había terminado y ayudarle a descansar para siempre y por tanto, el sábado, nos despedimos para siempre de él.
Hasta siempre, amigo. Vi sees snart i fjell.
Editado: 13-08-2014
Editado: 13-08-2014
Editado: 13-08-2014