Urubko completa los 14 ochomiles

De quitarse el sombrero.

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Urubko finaliza sus 14 ochomiles con una tremenda nueva ruta al Cho Oyu en estilo alpino

Por REDACCIÓN BARRABES.COM - < language="javascript"> Lunes, 18 de mayo de 2009 - 0 comentarios

Bien está lo que bien acaba. El Kazajo Denis Urubko acaba de perpetrar una nueva ruta en la cara sureste del Cho Oyu, durísima y en estilo alpino, de éstas que se sacan de la manga para asombro del resto del mundo los alpinistas exsoviéticos. 5 días en la pared, más 3 de descenso por la misma ruta. Aderezado con varias grandes tormentas que mantenían a todos en el campo base

No hay muchas más noticias, excepto las que Denis Urubko ha enviado vía sms a la web russianclimb.com. El tiempo era nefasto, y todos permanecían en el campo base, pero Denis y su compañero Boris Dedeshko decidían partir, por una cara prácticamente desconocida del Cho Oyu: la nepalí, situada en el sureste de la montaña. Denis había afirmado días antes que la ruta que pretendía seguir parecía durísima, pero que tanto él como Boris estaban dispuestos a luchar hasta el final.

No se llevaron teléfono satélite, y ahora, al descender al campo base, han enviado un sms a russianclimb en el que afirman que habían partido hacia cima el día 6, la habían conseguido el día 11 (al menos Denis, no se sabe respecto a Boris), y que les había costado 3 días descender, por la misma ruta, encontrándose ya en el campo base. No se nombra a Boris respecto a cima, quizás pueda pensarse que la decisión de descender por la misma ruta se debiera a que Boris no alcanzó la cima, y eso obligó a que Denis bajara hasta él, y continuaran el descenso. Pero son suposiciones.

También da algunos detalles: pasaron la primera noche a 6000 metros, sentados. El tercer día tuvieron mal tiempo, con muchas avalanchas, tras ser azotada la pared durante 15 horas por una tempestad, encontrándose ellos a 7600 metros. Descendieron por la misma ruta, durante 3 días. Se quedaron sin comida, y cuando llegaron al campo base, llevaban dos días sin probar bocado.

Una bonita forma de completar los 14 ochomiles, por parte de uno de los mejores alpinistas del mundo en la actualidad. No olvidemos que éste ha sido su último ochomil, pero su penúltimo fue, junto a Simone Moro, la primera cima invernal de la historia en el Makalu. En lo más crudo del invierno himaláyico, y en estilo alpino. Por no hablar de su cima en el K2 por la imposible cara norte.