A ver, primero que quede claro esto: propongo un nuevo tema de debate un poco por olvidarnos de la muerte de Manel. No va a servir a los que le conocian, pero distrae un poco de la tristeza.
Segundo, que quede claro esto tambien: a mi Juanito siempre me ha parecido un escalador de verdad, no soy de los que opina (como he leido por ahi) que es "un gordo con suerte y capacidad de sufrimiento, un andarin de altura". Sino todo lo contrario para mi es un alpinista de verdad: Juanito ha escalado el Aconcagua en invierno, el Corredor del Diamante en el Mte Kenia, muchas vias de escalada de verdad en los Alpes y los Pirineos, pero...
Queria, y hace tiempo que lo hago, lo comento con los amigos, hacer hincapie en las formas de descender que ha sufrido Juanito en varios de los ultimos ochomiles que ha subido. Tendinitus me ha recomendado que lea la entrevista en barrabes.com, y tras hacerlo, me resulta un poco rara la forma de describir su descenso del K2.
Hace ya tiempo, cuando lo del Kangchenjunga, del cual lo bajaron a rastras sus compañeros (insistia en que lo dejasen morir alli), yo pensaba que dejaria los ochomiles, pero sus posteriores descensos dramaticos en las 2 siguientes expes al Everest, con todas las polemicas con el oxigeno y las discusiones-replicas con el alpinista americano ese que le acusaba de estar tarado. Tambien le salvaron el culo.
Y esta vez, lo mismo: pero en mi opinion peor, porque no se limita a decir que lo ha pasado muy mal y le han ayudado a bajar. Esta vez admite veladamente que fue irresponsabilidad suya y ademas la forma de describir su descenso no habla claro de la ayuda vital que recibio:
"-Lo cierto es que cuando estoy subiendo, cerca ya de la cumbre, empiezo a notar síntomas de edema pulmonar. Arriba se acentúa bastante, tengo las palpitaciones muy exageradas, no podía respirar prácticamente, así que me caigo desplomado y le digo a Juan (Vallejo) que no sé ni cómo voy a bajar de allí arriba. Luego ya sé yo cómo voy a bajar, como siempre, con ganas y capacidad de sufrimiento, que es lo que me caracteriza (y con la ayuda de los demas, añado yo). Cuando empiezo a bajar me encuentro con otro problema, en la subida le había dado mi frontal a un porteador de altura, Hasan, que nos acompañaba y que intentaba ser el primer baltí en subir a la cima del K2. Pero se dio la vuelta y en vez de esperar en el collado, se fue para abajo.
En ningún momento pensé que podía cascar, pero lo que sí pensaba era que como tuviera que estar otras tres horas más allí me iban a tener que cortar hasta las orejas. Luego nos hicimos señas con el frontal y pensé: ?Estoy salvado?. Pero entre las señas y el momento que llegó Ferrán igual pasó una hora. Y yo pensaba: ?Joder, estos cabrones se han olvidado de mí?. Y de repente apareció Ferrán por detrás y se me abrió el mundo. Y tengo que decir que gracias a él estoy aquí de la manera que estoy. Se comportó como se debe comportar un verdadero himalayista, pasando de su cumbre y yendo a buscar a un compañero. Se lo agradeceré toda la vida, por eso digo que no hemos subido cuatro a la cumbre, sino cinco."
En mi opinion, no esta aqui de la manera que esta, sino que esta aqui vivo gracias a Juan Vallejo (una vez mas), Mondinelli, Latorre y los demas. Y es Juanito el que deberia haberse comportado como un verdadero himalayista, renunciando a la cima al ver que se hacia tan tarde y se encontraba en tan malas condiciones.
Si vale, es muy bonito hacer juicios desde el sillon de casa, pero en mi opinion, Oiarzabal deberia de dejar de arrastrarse por los ochomiles, que ya van varias ocasiones que le sacan vivo de milagro gente mucho mas fuerte que el, con muchas mas posibilidades de hacer cima y bajar por sus propios medios.
"-Una persona como yo, que ha estado expuesta a morir tantas y tantas veces, sin duda alguna tiene que tener algo por detrás. Un ángel de la guarda, no sé, algo. Porque lo que no es normal es lo que a mí me ocurre. He gastado ya prácticamente la totalidad de las vidas que tuviera. ¿Por qué estoy vivo? Sin duda alguna, entre otras cosas, porque uno tiene mucha suerte. Para subir 21 ochomiles, uno tiene que tener mucha suerte. A partir de ahí, entra el carácter, el organismo, la capacidad de sufrir y la ambición."
Mucha suerte y fortisimos y buenos amigos que participan en el circo que has montado estos ultimos años y te sacan las castañas del fuego cuando no puedes con tu alma. Y que quede claro que admiro tu brutal capacidad de esfuerzo, tu calidad como escalador, pero no admiro como estas administrando eso que tu llamas "suerte" o "angel de la guarda". Eres un grandisimo himalayista, pero creo que tus ultimos descensos, en esas condiciones, quieren decirte algo.
Pues mira yo creo que el problema es que Juanito se ha cegado por el afán de coleccionar 8000 y como ahí está Juan para irle a recoger...pues el va tirando...hasta que a Juan se le hinchen la pelotas y le de una patada en el culo....y es que tantas veces va el cántaro a la fuente...que al final se rompe. No puede ser que en cada expedición acabe ciego y teniendo que ser descendido...pero eso si la ascensión es sin oxigeno...No Juanito no has sido demasido grande como para acabar así, déjalo aun que puedes con honor....
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